


Homero Ramírez

31 mar 2022
a-ha: Campeones del synthpop en un ida y vuelta al pasado
En una noche tan estelar de éxitos concentrados, el único ‘fracaso’ fue que la cancha con asientos duró apenas los primeros cinco segundos de “Train of Thought”, que en las notas del hipnotizante teclado de una referencia de millones como Magne Furuholmen ya contaba con todas las filas de pie y el ánimo por convertir el salón romántico dispuesto en una pista de baile, nostalgia… y futuro.

Fotografía: Lukas Cruzat - a-ha - Movistar Arena 2022
A-ha se dedicó, en el primer acto, a presentar completo el “Hunting High and Low”, su plataforma que los llevó a viajar por todo el planeta desde el primer World Tour de 1986 y que los devolvió a Santiago tras 12 años para interpretar su octavo recital en la capital chilena en una velada que se reprogramó dos veces desde 2020.
Casi sin interrupciones (excepto por la disculpa ante la ausencia del tecladista de gira por contagiarse de coronavirus en Argentina) transcurrió el período en promoción y merced a baladas sintetizadas profundamente “Love Is Reason” sacudió el dancefloor, el corto que le da el nombre a la primera producción enamoró por doquier a un atiborrado Movistar Arena de linternas encendidas y manos agitadas en el outro extendido y entre “The Sun Always Shines on T. V.” y “Take On Me” se cumplió la premisa que, desordenada, se encomendaron los noruegos: alcanzar el peak con los hitazos y nunca bajar los escalones. Aquel par de elecciones bien podrían redondear un encuentro mágico, pero todos se quedaron pidiendo por más con el mega aperitivo en el estómago y la sonrisa de oreja a oreja.

Fotografía: Lukas Cruzat - a-ha - Movistar Arena 2022

Fotografía: Lukas Cruzat - a-ha - Movistar Arena 2022
Morten Harket advirtió antes del primer encore que el viaje a los ochenta ya estaba completado. Tocaba saludar a nuevos miembros de una discografía rica en variantes, no sin antes “Sycamore Leaves”, una joyita noventera del tono más rockero que cayó de cajón antes del par de sentidos estrenos (“Forest For The Trees” y “You Have What It Takes”) en la gira de un undécimo disco que se puede anticipar melancólico, transparente y de limpieza sonora evidente.

Fotografía: Lukas Cruzat - a-ha - Movistar Arena 2022
No había que despedirse abajo mas en nuevas altitudes y la hora del protagonismo de Paul Waaktaar-Savoy, el guitarrista que se aprovechó del momento pop rock para justificar las pancartas con su nombre. “Crying in the Rain”, original de Carole King, más puros golazos del segundo y tercer álbum (“The Swing of Things”, “Scoundrel Days”, “I’ve Been Losing You” y “The Living Daylights”) propiciaron el segundo estado de cumbre y relucieron que con 40 años de trayectoria se puede hacer muchísimo más que un greatest hits en vivo: madurar con los seguidores y no sentarse a fumar entre recuerdos, sino que renovarlos para que la posteridad premie a los campeones del synthpop por la valentía de formalizar vigencia.

Fotografía: Lukas Cruzat - a-ha - Movistar Arena 2022
