Bad Bunny en Chile: Entender el fenómeno, el primer paso

Por Homero Ramírez L. | Martes 25 de octubre de 2022

Que Bad Bunny cante en Chile no es ninguna novedad. Hizo 8 conciertos el 2017, 1 en 2018 y 3 en 2019. Que Bad Bunny realice un show de peso sí lo es: el portorriqueño de los récord se convirtió en una especie de figura a quién rezarle durante la pandemia del coronavirus, haciendo explotar el hype con cada uno de sus estrenos desde YHLQMDLG, el segundo álbum de estudio pero el primero que encontró reconocimiento mundial sin importar el idioma del destino. Los lanzamientos fueron seguidos atentamente por aquellas madrugadas.

Al igual que aquella pieza anteriormente mencionada, una que por primera vez podrá disfrutar el público chileno, “Un verano sin ti” y “El último tour del mundo” en su esplendor para dar vida al “World’s Hottest Tour”, una gira laureada de récords de audiencia y recaudación nunca antes vistos en el reggaetón, que todavía cobija a Benito Martínez pero que permite flexibilidad pues su primera misión hoy es encantar con su sinceridad e historias de vida que lanzar algo por hacerlo o porque el beat es bueno.

Bad Bunny, para quien se prepara un especial plan de seguridad, es un fenómeno principalmente porque el estilo matriz lo metió a la juguera con mucho reggae, bachata, dancehall, sonidos electrónicos, trap, R&B y mucho, pero mucho, perreíto.

El delirio es real y encanta a fanáticos pequeños y grandes por igual, pues además de su propuesta musical se ha convertido en una figura en la moda y la tendencia. De un día para otro, de la normalidad al lockdown mundial, BB pasó de ser un reggaetonero más, aunque uno en potencia para alcanzar al estrellato, a dar bastantes pasos con rapidez para instalarse en lo más alto. ¿La primera razón para estar en el Estadio Nacional en el par de noches mega esperadas por quienes agotaron con ritmo de F1 cada ticket del 28 y 29 de octubre? Corear cada himno del rey de Spotify y TikTok hasta rabiar.